Sagres

Sagres es un sitio fabuloso. Me encanta lo destartalado y simple que está urbanizado, porque eso hace que la atención se centre en el paisaje y no en las construcciones.

Para alojarse recomiendo encarecidamente  el hotel Memmo Baleeira. Hay hoteles más económicos (y menos )  en el Pueblo,  pero en mi opinión, éste es el que tiene mejor relación calidad/precio. Me gustan sus vistas, el atardecer desde su terraza tomando una cerveza “Sagres” y el minimalismo no forzado de sus habitaciones. Me gustan hasta sus huéspedes: sólo hay gente joven/ de alma joven y muchos surferos. Os dejo unas fotos del Hotel:

 

 

La visita imprescindible una vez en Sagres es la del atardecer en el Cabo de San Vicente .Es una experiencia ver como el sol abandona Europa continental delante de tus ojos. Muy recomendable también la visita a la fortaleza de Sagres.

 

Si por algo es famoso Sagres son por sus playas. Mi favorita es la Playa de Beliche .En el Memmo baleeira os ofrecen bicicletas que podeis utilizar para recorrer las calas.

 

 

Para cenar, muy cerca del hotel se encuentra el restaurante Gigi donde podemos comer platos típicos portugueses. Está muy bueno el bacalao dorado, el bacalao baleira y el pulpo aliñado.

Muy cerca también se encuentra la zona de marcha , que se concentra en la Rua Comandante Matoso. Nunca he ido a Sagres en pleno verano, así que siempre he visto el ambiente un poco muerto, salvo en el Pub Dromedario, que siempre está lleno. Nada de arreglarse para salir por la noche: aquí la gente guapa viste de forma relajada.

También cerca, en el pueblo de Vila do Obispo podeis comer percebes baratos y de buena calidad. No os recomiendo ningún restaurante en particular porque todos me parecen bastante similares en calidad y precio.

En la carretera que une Vila do Obispo y Carrapeteira, se encuentra la salida a la aldea de Pedralva donde no os podéis perder la pizzería Pizza Pazza. Aunque su acceso es difícil, es bastante popular, por lo que es recomendable reservar(ojo!cierra los lunes).Es un restaurante “slow food”, lo que tiene la gran ventaja de que los ingredientes son cultivados por sus dueños y el inconveniente, de que puedes esperar un buen rato para que te traigan la comida.El éxito de la Pizzería ha sido tal, que ha revitalizado lo que antes era un pueblo fantasma y ha atraído a otros restaurantes y tiendas, todos ellos con mucho encanto.